Hace algún tiempo os planteaba desde el blog de Sinergia Insular la pregunta ¿para qué debo estar en redes sociales? Si habéis dado el paso y estáis trabajando la presencia online de vuestra empresa seguramente habréis notado durante el verano (sobre todo si os dedicáis al turismo), una mayor actividad y movimiento en vuestros canales sociales, consecuencia directa de una mayor actividad e interacción de vuestros seguidores y potenciales clientes buscando información sobre vuestro negocio. Pues bien, ahora que la temporada está a punto de acabar y toca hacer balance y ajustar presupuestos, es también buen momento para retomar aquellos proyectos que pusimos en marcha y que se han quedado descolgados, y uno de ellos debería ser establecer la hoja de ruta para optimizar nuestro tiempo y esfuerzo en redes sociales de cara a los próximos meses.

Todavía son muchas las empresas que no tienen una política definida, ni una estrategia clara acerca del uso de estos recursos, lo que pone de manifiesto que el social media aún no está integrado en su modelo de negocio. ¡Que tu empresa tenga presencia en redes sociales, no significa necesariamente que sea una empresa “social”! Es decir, tenemos que compartir lo que hace nuestra empresa, pero también participar de las conversaciones en blogs, foros o redes sociales de otras empresas o usuarios, en los que se comparta sobre productos, servicios o experiencias similares a las nuestras. Por ejemplo, una librería no sólo tiene que publicar los libros y promociones que oferta, sino también opinar sobre noticias que comparten otras personas apasionadas por los libros o por otras librerías.

¿Cuales son los pasos fundamentales que debes considerar para crear tu plan de marketing online?

Te anoto en cada paso algunas cuestiones que deberías responder para elaborar tu hoja de ruta.

1.- Observar y analizar la situación

Este diagnóstico es fundamental y el pilar para que todo el proceso se desarrolle de forma coherente y alineado con los objetivos de la empresa.

Para el análisis interno y externo:

¿Qué problemática quiero resolver o qué necesidades satisfacer?

¿Con qué recursos cuento? (humanos, tecnológicos, económicos etc.)

¿Qué diferencia mi producto o servicio?

¿Cuales son los puntos fuertes a potenciar y las debilidades que mejorar?

¿Qué oportunidades puedo aprovechar y qué amenazas evitar?

Para conocer mejor a la competencia:

¿Están mis competidores en redes sociales?

¿Qué imagen y posicionamiento tienen?

¿Cuál es su estrategia y qué objetivos persiguen? (esto requiere de un análisis muy exhaustivo y la mayoría de las veces resulta complicado conseguir esta información)

Para conocer a mi público-audiencia:

¿Quienes son mis clientes?

¿Dónde se encuentran? (blogs, foros, redes, etc.)

¿Qué les gusta y qué no les gusta a mis clientes?

¿Qué quieren saber de mi?

¿Cual es mi nicho de mercado?

 Para extraer la reputación on line de la empresa:

¿Qué se comenta de nuestra marca, producto o servicio? (Contenido)

¿Quién habla de nosotros? (Fuentes)

¿Dónde se habla de nosotros? (Canales)

¿Quiénes somos en la red?

2.- Definir objetivos 

Debemos tener claro el qué y el para qué:

Para qué: si es para comunicar, promocionar, vender, sensibilizar, branding…

Qué: si es para un producto, una marca, un servicio.

¿Que quiero lograr?

¿Quieres relacionarte con tus clientes?

¿Quieres generar tráfico a tu web a través de enlaces externos?

¿Quieres gestionar o mejorar la reputación online de tu empresa?

¿Quieres fidelizar a tus usuarios?

¿Quieres ser un referente en la generación de contenido?

¿Quieres abrir más canales de comunicación con tus clientes?

¿Quieres posicionar tu marca?

¿Quieres incrementar el número de contactos?

¿Quieres mejorar el servicio de atención al cliente?

¿Quieres lanzar una promoción puntual?

3.- Formular estrategias

En el diseño del plan deberás incluir las estrategias que servirán de guía para el cumplimiento de los objetivos, así como las metas (objetivos específicos) que se deben traducir a nivel táctico, en tantas acciones como sean necesarias para cumplir con dichas metas. Y no olvides que toda estrategia en redes sociales debe confeccionarse en torno a las necesidades de los usuarios NO DE LA MARCA.

¿En qué redes voy a tener presencia?

¿Cómo puedo añadir valor al servicio y a mis clientes?

¿Qué tipo de contenido voy a publicar en cada canal social?

¿Como voy a hacerles llegar mi mensaje?

¿Cómo gestionar los recursos internos y externos para alcanzar los objetivos?

¿Quiénes van a ser los responsables de la comunicación?

¿Qué protocolos de actuación se van a establecer?

 4.- Diseño e implementación de acciones: ejecución

Una vez definido el plan hay que llevarlo a la acción. Tienes que ser consciente que la gestión de redes sociales implica un trabajo intenso y continuo en el día a día de crear y gestionar contenidos, fomentar la interacción, atender a las comunidades, monitorizar y medir resultados.

¿Qué acciones voy a llevar a cabo? (permanentes, puntuales)

¿Qué tipo de acción voy a poner en marcha en cada red?

¿A qué target de cliente las voy a dirigir?

¿Qué calendario de publicaciones voy a establecer?

5.- Control de acciones: medir y analizar

Y por supuesto es fundamental medir si se están consiguiendo los objetivos marcados o si es necesario reorientar nuestra estrategia y revisar dichos objetivos.

¿Qué variables voy a analizar?

¿Qué indicadores voy a establecer?

¿Qué herramientas de medición voy a utilizar?

¿Con qué frecuencia voy a revisar el cumplimiento de los objetivos?

Como ves no es un proceso para tomárselo a la ligera ya que, a fin de cuentas, estás definiendo las líneas de comunicación de tu empresa y la relación con tus clientes actuales y potenciales.

¿Ya tienes un Social Media Marketing Plan? ¿Cómo está funcionando? ¿Cuáles son tus recomendaciones?