¿Habéis oído hablar del Turismo Solidario?
Se trata de una forma de viajar diferente al turismo convencional por la que cada vez optan más personas que deciden dedicar sus días de descanso a otro tipo de turismo mucho más concienciado con el medioambiente, con el desarrollo local y con la realización de actos solidarios de ayuda a las comunidades locales. No debe entenderse como un simple turismo alternativo; la idea de reciprocidad, de ayudar pero sobre todo de aprender, de prestar atención a la gente con la cual se entra en contacto, y el esfuerzo de construir relaciones interpersonales, es lo que lo hacen realmente diferente.
Se puede considerar este tipo de desplazamiento como una forma de alcanzar la autorrealización a través de un turismo “útil”, a la vez que se conocen otras realidades y territorios y se obtiene la satisfacción de sentirse provechoso y de haber ayudado a la comunidad de acogida.
Las vacaciones solidarias suelen ser viajes en grupo organizados por ONG’s o agencias de viajes. Se puede dormir en hoteles con todas las comodidades, o en las casas de los habitantes del lugar conviviendo con ellos. Se puede preparar un itinerario o permanecer siempre en el mismo lugar. Y se pueden hacer viajes de unos días o de varias semanas.
Podríamos diferenciar varias alternativas para quienes se quieren aventurar en unas vacaciones solidarias:
Voluntariado
Existen numerosas organizaciones sin ánimo de lucro que promueven por un lado, la participación activa en proyectos solidarios en países en desarrollo y por otro, el desarrollo de las comunidades menos favorecidas a través de la responsabilidad social y el respeto. Trabajar en un centro médico en Guatemala, dar clases en una guardería en Perú, colaborar con un grupo de mujeres de Ghana en la producción de aceites para jabones, ayudar a poner en marcha huertos escolares en Gambia etc… son muchas las posibilidades.
Viajes de conocimiento y sensibilización
Se trata de viajes de corta o media duración a países donde la organización tiene proyectos. Lo que se intenta es que los visitantes conozcan la realidad de la zona, sus problemáticas y el trabajo de la ONG. Se organizan para grupos reducidos y contribuyen a mejorar la economía de las comunidades, sin trastocar su entorno y respetando su cultura. Con esta oferta para turistas, las organizaciones consiguen fondos o materiales para continuar con sus labores y logran una mayor sensibilización de las personas que se unen al viaje.
Turismo justo
En este caso el viajero no se responsabiliza de las tareas de un voluntario, ni tiene por qué visitar proyectos de cooperación, sino que recorre la zona como un turista al uso. El componente solidario es pagar un precio justo por los servicios a un colectivo desfavorecido.
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Recientemente he tenido la oportunidad de disfrutar de unas vacaciones en Gambia según esta “filosofía viajera” y os puedo asegurar que ha sido una experiencia inolvidable. Quisiera agradecer a mis compañeros de aventura, el trabajo realizado antes de la partida contactando con diversas personas y ONG’s y preparando el material escolar y medicamentos que hemos llevado desde Lanzarote y Tenerife para colaborar con los proyectos educativos y de desarrollo local de Afrikanarias ONGD , y de colaboración médica y humanitaria de Médicos Cubanos.
Este viaje ha sido para mí una experiencia enriquecedora que me ha marcado en forma de pensamientos, de miradas y de sonrisas. Ha despertado en mí multitud de reflexiones, me ha enseñado a ser más respetuosa y tolerante, a mirar la vida con otros ojos, obviar ciertos problemas personales y valorar las cosas pequeñas desde una óptica muy diferente. Podría decir incluso que me ha hecho indagar sobre el sentido de mi propia existencia y plantearme : ¿qué es lo verdaderamente importante? ¿qué es realmente necesario?
Creo que la mejor manera de cambiar es convencerse de que el cambio es posible y necesario, y que cada uno de nosotros podemos tener un impacto positivo en la vida de otras personas con la creencia firme de que el amor, la alegría y la solidaridad son el mejor regalo que poseemos, que podemos dar y que sin duda recibiremos.
Si queréis más información sobre vacaciones o voluntariado en proyectos de turismo solidario podéis visitar los siguientes enlaces:
- Alianza por la solidaridad
- Cooperatour
- Turismo solidario
- Taranna viajes solidarios
- Viajes solidarios
- TUI, Crystal Cruises, Virgin Holidays, British Airways entre otros grandes operadores turísticos también organizan viajes de aventura y voluntariado en el extranjero.
Con muchísimo cariño para Elena, Adrián, Tito Pi, Tata y todas las personas entrañables con las que hemos coincidido en este viaje: Marie Therese, Afrikanarias ONGD, Ismaila, Pappa y nuestro super guía y amigo Joachim 🙂
Siempre hay que buscar que el turismo solidario sea sostenible y esté planteado con criterios de turismo responsable, hay proyectos que no están desarrollados de esta manera…..y a veces tienen más impacto negativo que positivo.
http://www.turismoresponsable.es
Sin duda tiene que ser una experiencia única… Una amiga también estuvo de turismo solidario hace un par de meses por la India y.. buah! creo que ni si quiera ella tiene suficientes palabras para describirlo.
Gracias por tu aportación Julia,
Es una vivencia que recomiendo a todo el mundo. Te devuelve a la realidad, te ayuda a crecer, te hace mejor persona.
Un saludo ¡y anímate a vivirla en primera persona! 😉
Me han gustado tus reflexiones y las comparto. Saludos
Gracias Angel, un saludo
Buenas tardes amig@s, se me ocurren distintas reflexiones al calor de las precisas y preciosas letras de mis compañeras de viaje Esther y Elena, no puedo ser tan prosaico….aunque las sensaciones, emocion y gratitud que regresaron dentro de mi mochila son muy parecidas. Tal vez la vida no me ha dado tantas oportunidaes de viajar, y mucho menos con este planteamiento…pero desde luego mi vinculo profesional y la madurez con los que se acerca el que les escribe a los 50….mas la situacion socioeconomica que vivimos en la actualidad me han servido de orientacion y empuje para descubrir nuevas vias de ser y estar mas acorde y feliz con los tiempos que vivimos. Hace 5 años visite para llevar a cabo varios proyectos educativos con alumnos y profesores de la ULL los Campamentos de Refugiados saharauis de Tindouf, hace tres años que acojo a Abdeluahab dentro del programa vacaciones en Paz, y en febrero próximo volveré a los Campamentos con otros compañer@s a seguir formando maestr@s en el desierto….Desde entonces, todo este camino ha sido fluido, sin esfuerzo, consciente, y a más. Los días en Gambia no fueron sino una afirmación del camino elegido, así como de que las carencias y necesidades son tan grandes como destinos tiene el planeta. Sin agobios, pero con un firme propósito de regresar recuerdo las palabras de Joachim…sobre el significado de un pequeño caramelo para cualquiera de los niñ@s que encontramos…se acuerdan?? Eso, y las palabras que aqui les dejo del gran Eduardo Galeano, «La caridad es humillante porque se ejerce verticalmente y desde arriba; la solidaridad es horizontal e implica respeto mutuo.», las tomo como guía de viaje…y proyecto de vida. Abaraka, Un abrazo .
Muchísimas gracias por tu comentario Pi,y por esa magnífica cita que aportas de Eduardo Galeano que resume perfectamente ese cúmulo de sentimientos que he intentado expresar arriba.
Coincido totalmente con tu afirmación de que este viaje no ha sido simplemente una experiencia, sino, la confirmación de un camino a seguir. Un abrazo enorme 🙂
Lo que inicialmente era un viaje turístico se fue convirtiendo durante los preparativos de forma natural y espontánea en un viaje solidario que aportó una nueva y enriquecedora forma de experimentar el turismo, más completa y emocionante, muy intensa aunque en ocasiones frustrante, pero sobre todo enormemente gratificante.
Increíbles emociones te sacuden el espíritu y de dentro vomitas lo que ya no sirve, los valores absurdos, banales, hipócritas. Es un viaje en paralelo a lo más introspectivo de tu alma. Te sientes equivocado, pequeño y responsable.
Y descubres con ironía que recibes mucho más de lo que estás dando, y de repente ya no eres el protagonista de tu viaje. Solo deseas acunar esa tierra que es la misma que tú tienes y regalar a su gente un susurro de amor y un atisbo de esperanza, aunque todavía no sepas cómo hacerlo.
Y regresas a casa sintiendo que algo se ha roto y que ya nada es igual. En la historia de los viajes a lo largo de mi vida hay un antes y un después. Y nunca tuve tal certeza al abandonar un lugar de que iba a regresar para seguir aprendiendo grandes lecciones de vida que con suerte nos conviertan en mejores individuos.
¡Compañera, gracias por tus preciosas palabras! creo que este viaje nos ha tocado a todos en el alma y el corazón. Un besote enorme.